Bead Crochet segunda parte

Y como lo prometido es deuda... (Y para variar no me demoro en enseñaros el resultado), aquí os dejo la continuación al post de la semana pasada.
Muchos de vuestros comentarios me decían que no se apreciaban fallos.. 😫 Ay!! Si es que a veces me sale la vena perfeccionista: os diré que la tensión del punto, era más bien flojilla, y que por tanto algunas rocallas se dan la vuelta aunque no se aprecien y se puedan recolocar sin problemas..
Solución:
Tensar más el punto y usar un ganchillo un poco más pequeño.
En el otro modelo usé un 1.25 y en esta ocasión como veréis en las fotos es un 1.00.



Para este modelo he
usado rocallas del n° 8, que son un calibre más pequeño, por eso la pulsera y cordón resultante es más fino.


Un chisme por si no lo sabíais:
Las rocallas y delicas, siguen una numeración inversa, al igual que las agujas: a mayor número, más pequeña es la pieza (la Rocalla n° 11 es más grande que la Rocalla n° 15, y más pequeña que la Rocalla n° 9...). ¿Qué lío no?

El diseño es bonito aunque los colores que yo tenía para hacerlo no dicen mucho... Los rombos son de dos tonos distintos, y el color central es un plata viejo brillante .

Habéis visto que dentro del cordón he metido un alambre. Me sirve de guía para que este no pierda la forma según lo voy tejiendo.

Desde mi principiante punto de vista, lo más tedioso es enfilar las rocallas en el orden establecido para crear el patrón elegido. Si te equivocas en una sola... ¡Adiós al diseño!. Y calcular las que se necesitan es ¡otro dilema! (Aquí a mí me ha funcionado "el ojo del buen cubero").

Una vez terminado el cordón (o las rocallas que tenía enfiladas en el hilo😌) he montado otra pulsera😀.

Esta vez he usado el cierre y las casquillas en oro viejo y he añadido un candado decorativo junto al mosquetón.

Y hasta aquí mis incursiones en el Bead Crochet... por el momento.

Bead Crochet: ¡Por fin!

Esta entrada tiene mucho valor para mí.
Llevaba muchísimo tiempo queriendo aprender la técnica del Bead Crochet... ¡Y se me resistía una y otra vez! 
Supongo que no era el momento, o no estaba preparada. Lo intenté con diferentes abalorios, tamaños de agujas, hilos... ¡Nada!
Diréis:
-"no lo intentaste demasiado..."😏
-"¿Que no?"😎
-"soy tan plasta o perseverante que el que la sigue la consigue"😆
Y coincidiendo con el final de curso pasado, me puse seria.
Ya os he contado antes que mis chicas de Vallecas son un amor y súper apañás.
Desde que no soy su profe, han buscado la manera de seguir con sus manualidades y sus ratos de ocio: ellas se lo guisan y ellas se lo comen. Y aquí entre vosotros y yo: ¡ni falta que les hago! Porque hacen virguerías ellas solitas.
Bueno al lío que me disperso: la cosa es que me puse las pilas, y su autoenseñanza me motivó para sacar esto adelante sí o sí.

Para darme el empujón definitivo, hice un pedido de materiales por internet a Perles and Co., tienda francesa muy equipada en variedad de productos de manualidades y bisutería, e hice acopio de rocallas del n° 8 y n° 7 (por su tamaño son adecuadas a nivel principiante: el mío) y un hilo, en tonos neutros, que ponía era el óptimo para estas labores.
Nada como la sensación de abrir la caja cuando recibes el pedido y ver tantas cosas nuevas juntas... La inspiración te desborda, 😆.
Seleccioné los colores que iba a usar, (he de decir que ya no me parecía tanta variedad de colores como al principio🤔) enfilé las rocallas en el hilo y cogí el ganchillo que creí que se adaptaba al grosor de este último.

Una primera prueba... Y ¡voilà! Parecía que aquello cogía forma: "No hay nada como estar en sitio adecuado, en el momento adecuado"😌.

Dos o tres intentos después ya creí haber cogido la suficiente soltura como para empezar en serio. Y este es el resultado del primer cordón Bead Crochet que he convertido en pulsera.

Tiene sus defectillos... Pero me he resarcido y los he subsanado con el siguiente trabajo que os enseñaré en breve.
Si ya sabíais hacer esta técnica seguro que os ha resultado un rollazo llegar hasta aquí. Sorry! La próxima no me enrollo tanto...
Sólo dejaros algún vídeo que a mí me ha ayudado en el proceso de aprendizaje.

Próximo reto en mente: aprender "tating o frivolitè". ¿Teneis alguna idea, curso, profe que me pueda ayudar?...

Y sin más dilación me voy a visitar el espacio de Marcela: Colorín Colorado, y las propuestas para el Finde Frugal 143.

Anillos half tila

Siguiendo en la línea de la pulsera Herringbone que os mostraba hace unos días en la entrada que podéis ver aquí, hoy os dejo unos anillos sencillos que siguen la misma puntada pero al ser en dos únicas líneas parecen espigas.
Están hechos con medias Tilas y rocalla del n° 15.

Perdonad las imágenes🤔. No he conseguido nada mejor. 

El tercero que hoy no puedo enseñaros porque lo regalé, era en tonos marrones.

¿En qué colores creéis que pueden quedar bonitos?

Pizarra Country

Coincidiendo con el cumpleaños de Erik, y esto fue en mayo😱, acabé ¡por fin!🙆 la pizarra que había empezado hacía unos cuantos meses.

Primero tuve el fondo propiamente dicho: una tabla de DM de 0,5cm. Pintada con pintura negra de pizarra, varias manos contrapeadas y lija entre ellas para evitar rayas. 

Había que añadirle decoración. Y como siempre tengo miles de cosas guardadas "por si", encontré varias plantillas  en DM prediseñadas que me podrían servir para la ocasión.

Además de estas dos que he usado, pinté unas "gorjuss", que descarté finalmente.

Primero hice la familia feliz😊.

Con acrílicas y dos manos de barniz satinado de poliuretano.

En la silueta, los personajes tienen marcada la carita triste... Y  así no las iba a poner: O lucían caritas sonriente o nada.

Después la gallina Turuleta. 

Ya sabéis que me gusta la decoración country... E intenté darle ese toque tan especial a la silueta.

Para terminar, sopesé varias opciones: hacer un marco con alguna plantilla de estarcido, usar cinta carrocera y algún color para delimitar la zona de escritura... Pero nada me convencía😐.

Tras muchos titubeos recordé unas letras de madera adhesivas que había visto en un comercio "multi precio". Las recordaba cursivas; pero no había. Éstas no me terminaban de encajar; pero una que es impaciente a tope cuando quiere, no podía esperar más para terminar la dichosa pizarra, y me las llevé a casa.

La elección de la frase fue en común acuerdo con el "otro adulto" de la casa. (Si no probablemente hubiéramos escrito algún diálogo de Frozen o Pepa Pig😯).

Una vez pegadas las letras (antes ya había colocado las dos siluetas), les di color y dos manos de barniz acrílico como al resto de figuras decorativas.
Cuando ya hube colocado la composición en la puerta de la cocina, decidí imprimir y plastificar (con la plastificadora que compré el curso pasado en Aldi para los trabajos del cole y con la cual estoy requetecontenta) unos cartelitos que están ahora en auge con frases positivas. Tengo unos cuantos y los cambio según el día, cómo me siento y lo que quiero transmitir en ese momento (aunque tengo mis dudas de ser la única en casa que los lee😌).

Bueno y ya que es viernes me acerco a compartir la entrada con Marcela en su Finde Frugal 142 y ver las propuestas del resto de participantes que siempre aportan mucha creatividad.
¡Feliz fin de semana!

Pulsera Herringbone blanca

Antes de que termine el verano.... y queda muy poco, me gustaría enseñaros una de las pulseras que terminé al inicio del mismo, y que luce perfecta con el tono bronceado de la piel. Son varias pero esta es quizás la más vistosa al ser blanca.

Hay muchos vídeos en YouTube que muestran cómo hacer ésta puntada tan característica usando piezas de cristal checo de dos agujeros (rulla beads tilas/half tilas, súper dúo y mini dúo beads); si te apetece aprender, o ya sabes y simplemente te gusta el modelo, te dejo el enlace a un vídeo de Potomac Bead Company, donde muestran cómo hacer Herringbone Stitch.

Creo recordar que el vídeo es inglés.
Os dejo los materiales que se necesitan para realizar este modelo (existen muchísimos colores e infinidad de combinaciones posibles. Este sólo es una muestra).
Son:
Rulla beads en dos colores
Rocalla n°11 y n°15
Hilo Nimo o C-Lon y aguja
Y un cierre.

Espero que os guste.
Feliz semana

Kinder ganchillo II

Hace unos meses os enseñaba una rana de ojos saltones hecha con ésta técnica que podéis ver aquí.

Y hoy os muestro dos huevos más.

Una simpática abeja.

Los ojos son de fieltro con las pupilas pintadas y las antenas del mismo hilo de tejer la abeja, puesto doble y endurecido con Rakol.

Y un bolsito sin mucha decoración. La diferencia del envase con respecto al tradicional es que éste cierra con rosca y se separan ambas partes.

La parte inferior la he tejido en puntos bajos cogiendo sólo la hebra interior de cada punto, y por eso queda como un canalé. La parte superior en puntos bajos normales y rematando el cierre unas ondas en azul. Irene lo usa para guardar un anillo de Hello Kitty en delica y alguna pulserita.

Para los cordones he usado cola de ratón.

También os dejo un enlace al tutorial por si os animáis a probar... de ser así ¡me encantaría ver vuestras propuestas!

Aprovechando que es viernes me animo a participar por primera vez en el Finde Frugal 141 de Colorín Colorado de Marcela Cavaglieri.

Si os apetece pasar a ver el resto de propuestas por allí nos vemos.

Juegos matemáticos Diy MM III

“Miércoles Mudo” es un carnaval de blogs o blog hop iniciado por Maybelline de Naturalmente Mamá y participar es muy fácil, solo debes publicar los miércoles una foto (s) sin escribir nada para explicarla (s) (de ahí viene lo mudo). Luego no olvides enlazar en el linky que está debajo y dejar un comentario en cada uno de los blogs que decidas visitar. Para conocer como nació el Miércoles mudo y sus reglas, puedes hacer click aquí.

¡Feliz Miércoles!

Podrás ver el resto de propuestas pinchando AQUÍ

Medidor Country

Ya estamos de vuelta a la rutina... o casi.
Porque aún nos queda la vuelta al cole, que para muchos es nuestro re-inicio de año.
Pensaba que, ahora, quizás con algo de buena suerte, iba a disponer de algo de tiempo libre para mis cosillas... lo llevo de color😟. No se porqué me huelo 👃que va a ser todo lo contrario.
Total, que seguiré como hasta ahora: renqueando y a salto de mata. Anhelando todo lo que quiero y no puedo. Y sintiendo envidia malsana (por eso es envidia) cuando lea colaboraciones entre compis, participaciones, propuestas, cursos de manualidades y quedadas a los que no pueda acudir, actualizaciones monísimas de blogs, cuando sepa de retos en los que quisiera participar y no saque ni cinco minutos... y tantas y tan variadas cosas a las que no doy alcance porque las horas no me dan pa más.
Por todo ello seguiré improvisando el día a día y que ¡salga el sol por Antequera!

Dejando de lado este arrebato de egoísmo y autocompasión diré que quejarse😯 es gratis (y por eso lo hacemos😜); porque si de algo estoy orgullosa es de poder disfrutar de quien me roba tan preciado tiempo: los peques. No tendré vacaciones en Ibiza, pero ¡qué leches! a cambio les veo crecer -que lo hacen muy deprisa, o a mi me lo parece-.

Ahora que he soltado el tostón y me he quedao tan agustito vamos al lío.
Hoy os enseño un medidor infantil en madera DM, pintado con acrílicas y decorado estilo country -que me chifla-. Ésta osita y su rico panal de dulce miel, hace tiempo que decora la puerta de la futura habitación de los peques.
Lo comencé durante un curso que impartía Carmen Carrasco y como casi siempre ocurre en este tipo de eventos no pude terminarlo en el momento.
Así que al período que anduvo vagando por casa hay que sumarle el de terminar y rematar los cabos sueltos: perfilar, pegar las piezas, pintar números y colocarlo en el lugar apropiado. ¡Casi ná!

Las letras son de goma Eva de 5mm.

Y hasta aquí por hoy. Septiembre llega cargadito de proyectos e ilusión. Me voy a ver qué se cuece por ahí.