Ya sabéis que me gusta usar o reutilizar material reciclado. Las chapas de refresco de este monedero tienen un valor especial. Mi padre limó cada pieza para que no cortasen. Las guardo para trabajos especiales como éste.
Por lo demás no tiene misterio, punto bajo tejido en círculo. Le puse forro para no perder los eurillos...
Se queda monísimo y si además tiene el cariño de unas manos paternas que han intervenido más todavia. Me encantaaaa....
ResponderEliminarMuy bonito. Ese hilo azul eléctrico tan brillante y las chapas plateadas lo hacen más bonito si cabe. Muy buen detalle el del forro, que no estamos para tirar nada!
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