Hoy, después de mucho tiempo vengo con un trabajo de manualidades propiamente dicho, y del que me siento súper orgullosa.
Es una mezcla de técnicas y materiales para renovar un mueble auxiliar y darle un aire diferente al que tenía de inicio.
Con la llegada del nuevo año vengo con la pila recargada (aunque no sé lo que durará), y me sumo a mi segundo reto, esta vez de la mano de El Refugio de Lirtea en el Reto Mensual Bloguer@s.
La gran metedura de pata es que no os puedo enseñar el antes porque no hice foto...😱 Pero os lo lo cuento porque es muy sencillo de imaginar: sólo he cambiado el aspecto de las tablas (estaban en color madera Haya barnizada. He intentado buscar la imagen en la tienda online de origen del mismo pero no la he encontrado). La forja sigue sin retoque alguno, por expreso deseo de la propietaria.
Esto comenzó a mediados de septiembre.
Sí. Ya lo sé. Ya ha llovido (en algunas regiones no tanto que andamos con la contaminación y las restricciones de circulación a vueltas)...
Aure me pidió que le diese algo de color a las tablas de madera de un mueble que había comprado, pero que no le gustaba mucho. Creo que ella tenía en mente algo más sencillo, pero la libertad que me otorgó para hacer lo que me diese la real gana apeteciera, tiene sus ventajas e inconvenientes 😇.
Por aquel entonces hice un taller gratuito en Leroy Merlín de la mano de Delanina (una mujer excelente, pasad por su blog para ver sus fantásticos trabajos) y aproveché para hacer acopio de pinturas acrílicas efecto tiza de la marca Xylazel®. Normales. Para usar con pinceles. Sin Spray. Que ya sé que ahora son lo más (me refiero a las pinturas en spray) y parece que el resto de pinturas han dejado de funcionar... pero no. Hay mundo más allá de las Chalky Paint en spray 😎.
(Bueno, bueno... Que soy de carne y hueso, he picado y también tengo un par de esos sprays para probar, y espero hacerlo pronto 😬).
Los colores escogidos son rosa porcelana, blanco antiguo, azul pastel y verde laurel.
Es posible que no se aprecien diferencias en las imágenes porque todos ellos son tonos muy pálidos.
Como estas pinturas no necesitan imprimación o tratamiento previo de la madera para fijarse, son muy prácticas.
Un par de manos por color y tabla y lija mediante (para decapar y sacar la veta en algunos puntos de la madera y darle ese toque envejecido) y ya estaban las tablas preparadas para meterles mano🖐.
Entre unas cosas y otras ya habíamos llegado a octubre y la Feria Creativa.
¡Uy! Aquí ya sabéis lo que suele pasar: a comprar como loca: servilletas, papel de arroz, papeles preparados con imágenes de transferencia, pinceles, ceras, lazos, puntillas, plantillas para estarcido... Y una novedad para mí: rotulador "Original Tranfer" que transfiere las imágenes elegidas (en modo espejo e impresas en láser) sobre cualquier superficie porosa (en madera barnizada no funciona, que lo he probado). Así, sin mucha chicha. Sin colas ni ná de ná más: la imagen boca abajo donde queremos transferirla, pasamos el rotulador y ejercemos presión sobre el papel con un palillo de madera (de los que usan los médicos para mirar gargantas... ¡Diga aaaahhh!), Y al levantar el papel... ¡Magia! La imagen ha quedado grabada.
(Es una variante más sofisticada de usar el disolvente de toda la vida a cascoporro, creo yo🤔.)
Y es el método que he usado en varias imágenes de distintas tablas.
(Es una variante más sofisticada de usar el disolvente de toda la vida a cascoporro, creo yo🤔.)
Y es el método que he usado en varias imágenes de distintas tablas.
Hecho el acopio, sólo quedaba meterle mano a la decoración.
Y éste es el resultado tras miles de idas y venidas, dudas y montajes previos.
La tabla azul pastel está decorada en su mayor parte usando imágenes transferidas con el rotulador mágico. Como toque unas letras y la cenefa floral en estarcido. Es sin duda la tabla más recargada. Para terminar un mínimo de tres manos de barniz acrílico satinado "aquavarn de innspiro®" para proteger el trabajo e integrar las diferentes texturas (lijando suavemente entre capas para que el resultado sea óptimo).
Pasamos a la verde laurel. En ella convergen las técnicas anteriores, con dos rosetones de stencil y algunas transferencias de rotulador y los transfer realizados con el método de siempre: cola para transferencias, alkil, mod podge o aquello que uses normalmente para pegar el papel con la imágen deseada y presionar hasta que éste quede bien adherido a la superficie y sin burbujas. Esperar el tiempo estimado por el fabricante de la cola, para que seque adecuadamente y empezar a retirar suavemente la celulosa humedeciendolo poco a poco, hasta que no queden restos de papel y se vea con nitidez la imagen impresa. Hay muchos tutoriales de la técnica por la red. Sin ir más lejos la anfitriona de este reto, Lola, tiene unos fantásticos que os detalla los pasos a seguir para conseguír una transferencia con éxito. Podéis verlos AQUÍ y AQUÍ.
Las capas de barniz que no falten.
Llegamos a la tablilla pintada en rosa porcelana. La novedad es la incorporación de decoupage con dos motivos de servilletas. Las bicicletas, que me chiflan y una libélula.
Antes de pegar las servilletas, les paso la plancha caliente por encima (sin vapor, y protegida con un papel de cocina u horno) para disimular lo máximo posible los bordes punteados que tienen.
Más stencil y transferencias para rematar.
Las capas de barniz que no falten.
Antes de pegar las servilletas, les paso la plancha caliente por encima (sin vapor, y protegida con un papel de cocina u horno) para disimular lo máximo posible los bordes punteados que tienen.
Más stencil y transferencias para rematar.
El final llega con la tabla en blanco antiguo. El estarcido con una plantilla tipo panal de abeja y en tono verde claro aguacate está hecho previo a empezar con la decoración.
El sobre color ocre es un resto de aquél papel especial de decoupage que usé para decorar la caja de madera que podéis ver AQUÍ; y la imagen de los pajaritos en una zarza es papel de arroz.
Dudé si sombrear algunas zonas con pátinas, pero finalmente me decanté por dejarlo tal cual porque me parecía más luminoso el resultado.
Sin duda es la tablilla que más capas de barniz lleva, porque me costó integrar los distintos materiales y que no se noten los bordes de los mismos al pasar los dedos.
Una vez montado el mueble luce así.
Os dejo algunas imágenes con distintos motivos
El sobre color ocre es un resto de aquél papel especial de decoupage que usé para decorar la caja de madera que podéis ver AQUÍ; y la imagen de los pajaritos en una zarza es papel de arroz.
Dudé si sombrear algunas zonas con pátinas, pero finalmente me decanté por dejarlo tal cual porque me parecía más luminoso el resultado.
Sin duda es la tablilla que más capas de barniz lleva, porque me costó integrar los distintos materiales y que no se noten los bordes de los mismos al pasar los dedos.
Una vez montado el mueble luce así.
Regreso a la excusa para dejaros esta entrada, que no es otra que mi participación en el Reto Mensual Bloguer@s. Con el nuevo año se ha modificado la imágen y logo del reto, pero no la esencia. Os emplazo a visitar a nuestra anfitriona y el resto de propuestas pinchando AQUÍ.

Hasta aquí, todo por hoy. Os dejo con la imágen que me han hecho llegar de la estantería ya colocada en su hogar.
Y con este auxiliar, me voy de visita a casa de Marcela, que está de vuelta con su Finde Frugal
Otro día más y mejor... O eso espero.
Y con este auxiliar, me voy de visita a casa de Marcela, que está de vuelta con su Finde Frugal
Otro día más y mejor... O eso espero.